La Europa de la restauracion

Europa de Viena 1815

Las dos directrices de la restauracion.

La epoca que, contraponiendose a la de la revolucion suele llamarse de la restauracion, responde a dos orientaciones antagonicas: una, mirando hacia el pasado, se nutria de la utopia de un regreso puro y simple al mundo existente antes de 1789; la otra era consciente de las profundas e irreversibles trasnformaciones acaecidas en un cuarto de siglo (1790-1816). La reposicion de las dinastias "legitimas" no impidio que surgieses y se afirmase en los pueblos la idea de nacion, como consecuencia a la vez que reaccion ante el expansionismo frances. Desde una primera confusa conciencia nacional alimentada por el culto romantico a la tradicion popular, la idea se transformo progresivamente en una verdadera doctrina, prontoconectada con una corriente de pensamiento, el liberalismo.

Estas dos directrices conviven no solo en Francia , sino en toda Europa. Al volver al trono de España, Fernando VII ignoro la heroica resistencia de su pueblo desde 1808 y abolio la constitución de 1812, que habia consagrado el principio de soberania nacional, restableciendo un régimen absolutista.

En Prusia, el sentimiento nacionalista se habia unido al principio de la libertad alentado esperanzas que permanecieron vivas incluso cuando Federico Guillermo III triunfo sobre los franceses.

En Italia, los jefes del parlamento siciliano habian arrancado de la monarquia la constitucion de 1812. Despues de la derrota de Murat, Fernando IV de Borbon cambiano su titulo por el de Fernando I, Rey de las Dos Sicilias, encontro el modo de abolir la constitucion. Tambien en el reino de Cerdeña fueron restablecido el antiguo regimen y los derechos feudales y abolido el código napoleonico; sin embargo, Victo Manuel I se esforzo en no caer completamente en el circulo de influencia autriaca.

Belgas y holandeses, reunidos en un unico Estado para frenar el expansionismo frances, estaban demasiado divididos par que los primeros se resignasen a convivir con los segundos. Y dentro del Imperio de los Habsburgo, a pesar de la unidad impuesta por Metternich, no tardaron en surgir las tensiones originadas por el mensaje revolucionaro. Al margen de la Europa postnapoleonica, en la Rusia de Alejandro I se enfrentaron tammbien lo antiguo y lo nuevo: regimen absolutista por un lado, y propension, por otra parte, tanto intelectual coo sentimental, a acercar la Rusia todavía feudal al Occidente. En el imperio otomano, servio y griegos empezaron a presionar impacientemente para obtener el reconocimiento de su identidad nacional